Por Aimée Cabrera.
Las diferentes asambleas partidistas celebradas en todos los municipios del país, arrojan quejas e inconformidades con aspectos relacionados con la indisciplina laboral y social, los incumplimientos, la doble moral, y tantos otros, que junto a la obcecada política gubernamental constituyen frenos al desarrollo nacional.
Con fecha 20 de junio, el periodista Ramón Barreras entrevistó a Gladys Bejerano, Contralora General de la República para el periódico Trabajadores, donde trataron diversos temas a propósito de la economía del país.
Ante la pregunta del significado que tienen la educación, la orientación y la prevención en el control de los recursos estatales, respondió que “en ellas radica el camino real para tener conocimiento pleno y la información, y… exista mayor conciencia de la responsabilidad y el compromiso que se asume…”
Y a continuación, reconoció que “hemos tenido que enfrentar casos en los que las personas han perdido valores e incumplieron sus deberes conscientemente con el objetivo de beneficiarse”, además de señalar que existen quienes asumen cargos administrativos sin tener la preparación y los conocimientos, para enseñar a su vez a los trabajadores a producir con calidad para obtener así, buenos resultados.
Después Barreras quiso que la también Vicepresidenta del Consejo de Estado expusiera el papel que le corresponde a la Contraloría General de la República en la actualización del modelo económico cubano, para lo que explicó que “… debemos ayudar a la administración a establecer fórmulas para fortalecer sistemas de control que sean practicables, alejados del burocratismo, y que constituyan verdaderos instrumentos de dirección… para que las administraciones sean más eficientes…”
Más adelante, el reportero enfatizó que la Contraloría tendrá 2 años de creada el próximo 1ro de agosto, y pidió una valoración al respecto. Bejerano dijo que ha sido una etapa fuerte e intensa para la cual tuvieron que crear un nuevo órgano a partir de la Ley 107 y establecer nuevos reglamentos, asumiendo la responsabilidad de auditar el presupuesto estatal.
De manera crítica, Bejerano opinó que estaba insatisfecha con todo lo realizado en cuanto al Sistema Nacional de Auditoría, por no haber alcanzado el nivel necesario, a pesar de que se ha trabajado en otros aspectos relacionados como es la actualización de las Normas Cubanas de Auditoría.
Antes de finalizar, la funcionaria recalcó que no se ha obtenido un nivel de participación adecuado en los trabajadores ya que las administraciones no han realizado la correcta capacitación de los mismos. Ni ellos, a su vez, han sabido exigir a la administración para que ésta les rinda cuenta de manera periódica y detallada, y asimile tanto sus ideas e iniciativas, como sus criterios.
La última interrogante fue sobre el futuro de la economía cubana, la cual dijo estar limitada por complejidades existentes tanto dentro de la Isla como en el exterior. La Contralora puntualizó las directivas que ha trazado el VI Congreso del Partido Comunista como única solución para ser más eficaz.
Quedan muchas dudas para la masa trabajadora, esté especializada o no, en materias relacionadas con la economía. Las trabas impuestas por el Estado y el eterno burocratismo que lo caracteriza, son una de las causas del estancamiento que no permite el visible mejoramiento que beneficie de forma directa a los trabajadores y a la población en general.
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