La vecina Guillermina, quien reside en la calle 17 y Doble Vía, Santiago de las Vegas, se manifiesta preocupada por la situación de su vivienda, ya que es de madera y con muchos años de construida, y después del paso de los huracanes que azotaron la isla el pasado año, su vivienda quedó casi destruida, convirtiéndose en inhabitable, decretado por un grupo de especialistas de la UMIV (Unidad Municipal de Inversiones de la Vivienda), encargados de valorar el estado constructivo de los inmuebles.
También fue visitada por personas del Poder Popular en una Comisión Especial para casos de desastres. Todos estuvieron de acuerdo en que a Guillermina había que ayudarla, porque además de todo esto es una persona de la tercera edad, tiene 65 años, con problemas de salud, como la diabetes, que la afecta actualmente. Los primeros días después del desastre fue visitada muchas veces con la promesa de la ayuda que se fue posponiendo, y hasta la fecha no le llega.
Esta preocupación le roba el sueño a Guillermina, ya que ella vive con la pena de que un día amanezca sin casa, o peor aún, que cuando despierte la casa esté encima de ella.
Ciudad de La Habana, 6 de junio de 2009.
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