La angustia de ser inválido en #Cuba

Barcelona/ Mambises en A/ Los medios oficiales pregonan que la asistencia social es un logro de la revolución y que ningún ciudadano desvalido queda desprotegido, pero algunas evidencias demuestran lo contrario, como es el caso de José Antonio González Borrego, nacido el 28 de octubre de 1960 y con domicilio en calle 104 edificio 8908 apartamento 2 en el Reparto Pekín, Güira de Melena, provincia de Artemisa, es un impedido físico con su brazo derecho inutilizado y que tenía úlceras en sus dos piernas producto de la diabetes que padece.

Su salud fue empeorando al extremo de presentar gangrena seca, lo que según diagnosticó el médico era necesario proceder a la amputación de ambas extremidades, y así se hizo.

Este señor convive con su esposa que presenta trastornos siquiátricos y tampoco puede trabajar; así como una hija y una nieta. A pesar de la difícil situación que tienen no han sido beneficiados por la asistencia social.

La hija que se nombra Yakima González Puebla, está desocupada, ella tiene muy bajo nivel escolar, por lo que le es muy difícil conseguir algún tipo de empleo. De forma ocasional trabaja en una panadería y le pagan 25 pesos moneda nacional al día, que es equivalente a 1 cuc (peso cubano convertible).

A pesar de las gestiones que ha hecho esta familia, no tienen ayuda alguna, y en muchas ocasiones, incluyendo al enfermo, se acuestan sin llevarse algo de comer a la boca, esto sin contar las pésimas condiciones en que viven.

Informó desde Artemisa, Cuba, Jorge Bello Domínguez, Red Cubana de Comunicadores Comunitarios.