Por: Magaly Norvis Otero Suárez, Periodista Independiente
Niegan atención médica especializada a Luis Cueto Echevarría, recluso interno en el centro penitenciario de Aritza, prisión de máxima severidad, ubicada en la provincia Cienfuegos.
Al reo le fue realizado un ultrasonido por las dolencias que presentaba en ambos riñones, y le diagnosticaron que presentaba un quiste de 5 cm al nivel de la colesa renal de calis.
El examen fue realizado en el pasado mes de febrero. Raquel la técnica de ultrasonido le recomendó al cautivo ver a un especialista en urología en el menor tiempo posible para comenzar un tratamiento, y así evitar males mayores.
Cueto refiere que lleva 3 meses esperando ser llevado al urólogo para comenzar el tratamiento para poder aliviar su padecimiento que cada día empeora más, los galenos responsables de la salud de los internos siempre tienen la misma respuesta: "tranquilo Luís, la próxima semana vemos lo tuyo", que más tengo que esperar.
Además agrega Cueto que los reclusos carecen de la atención médica y estomatológica, que conviven en condiciones infrahumanas, insalubres, degradantes, pésimamente alimentados y el agua potable completamente contaminada, y para que mencionar las plagas de insectos y roedores que nos acompañan.
Pudiéramos hacer sobre la base de los hechos una descripción detallada de la vida infernal a la que es sometida la población penal en las cárceles castrista, donde los maltratos físicos y verbales son constantes, concluyó Luis Cueto Echevarría, sancionado a 20 años de prisión por el delito común de tentativa de robo con fuerza.
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